"ENSAYO, CASO: LA POBREZA "

“ENSAYO, CASO: LA POBREZA”

¿Ha disminuido la pobreza en la región de Coquimbo?

Pobreza se considera cuando una persona o familia destina la integridad de sus ingresos a alimentación, no pudiendo cubrir otras necesidades básicas y extras como educarse, poder vestirse u entretenerse.

La pobreza en la Región de Coquimbo ha sido un tema muy preocupante, puesto que aunque ha disminuido a un 13,1%, sigue siendo la región con más alto índice de pobreza a nivel país. La deflación en la pobreza en la Región de Coquimbo tiene una relación directa con el aumento de la economía, la creación de nuevos puestos de trabajo y elevación en los salarios reales a nivel país. No obstante, en la región la actividad económica se estrecha, incidiendo en la mala ubicación a nivel nacional.

La política pareciera favorecer la mantención de la pobreza; amparando a las personas de escasos recursos como “bandera de lucha”. Las campañas electorales se tiñen de esta dura condición, para después pasar al olvido.

Las personas no nacen pobres, sino que esto se va dando con el tiempo. Los mismos medios “hacen” que un ser humano asuma y valide esta condición, a través de un asistencialismo sensacionalista. Además, muchas veces sobre ellos recae la estigmatización, que reproduce altos índices de delincuencia e ignorancia.

Estudios evidencian otra realidad, como por ejemplo: los hogares pobres en promedio tienen más integrantes que los hogares no pobres; o que el mayor número de familias pobres se encuentran con mayor frecuencia en un momento inicial del ciclo de vida familiar, es decir, los padres tienden a ser más jóvenes y tener un número mayor de niños pequeños y escolares.

En este sentido la respuesta viene a ser “Educación”, no sólo en el sentido formal de la palabra, sino que a todo nivel; cobrando especial interés la educación para la vida y con sentido comunitario.

El Periodista, que siempre está en la actividad social, se constituye un agente de este cambio, en el que las Organizaciones comunitarias dejen de ser vistas como recipientes, para distinguirlas como emisores de la comunicación.

El comunicador deberá estar dispuesto a poder ayudar en una comunidad, proyectándose en ella a partir de sus características más amplias, y a la vez más desarrolladas que no sólo son el reportear o producir medios audiovisuales, sino que un profesional capaz de planificar y gestionar los medios para una organización.